domingo, 28 de agosto de 2016
Juste avant la nuit (Claude Chabrol, 1971)
La contemplación de Juste avant la nuit resulta impactante por la notable capacidad de Claude Chabrol para acometer una filmación extremadamente fría, racionalista y depurada de cualquier énfasis o evidente emoción en torno a unos temas tan propicios a tales excesos como son los del crimen y la culpa. En efecto, Chabrol opta por construir unos planos en los que se adopta una distancia respetuosa en relación con las escenas y los personajes y prefiere emplear ligeras panorámicas de reencuadre, antes que recurrir al montaje, para hacer seguimiento de las escenas. Todo ello conduce a producir un efecto de enfriamiento en la narración de una historia tan preñada, en principio, de emocionalidad como debería serlo la que en la película se cuenta; a contemplar el crimen y la culpa en el medio burgués con un afán casi "entomológico".